La industria del aire acondicionado y la refrigeración en EE. UU. está eliminando gradualmente el uso de refrigerantes con mayor potencial de calentamiento global (GWP) a partir del año 2022, lo que requerirá diferentes refrigerantes con índices de GWP más bajos. La mayoría, si no todos, de estos refrigerantes tendrán una clasificación de seguridad A2L, según la referencia ASHRAE.
La clasificación A2L es nueva, por lo que los malentendidos que suele generar son comprensibles. Cuando miramos el cuadro de clasificación de seguridad de ASHRAE, vemos que hay dos columnas y cuatro filas. Las columnas indican la toxicidad del refrigerante (más baja a la izquierda y más alta a la derecha) y las filas indican el nivel de inflamabilidad (Sin propagación de llama en la parte inferior hasta Mayor inflamabilidad en la parte superior).
Si bien todos los refrigerantes crean un peligro inherente para los operadores por posible asfixia, muchos de ellos solo lo son si se liberan grandes cantidades de refrigerante que puede desplazar el suficiente oxígeno en el área, pero hay algunos de ellos que se consideran tóxicos y reciben una clasificación "B" , como por ejemplo es R-717 o amoníaco, que es un refrigerante del tipo B2L.
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